Nadal, desde Barcelona: «No queda más que mirar adelante»
El español tuvo que bajarse del torneo tras su partido de cuartos de final de Wimbledon
Tiene una rotura de siete milímetros en el abdominal
El español Rafael Nadal anunciaba el jueves su decisión de retirarse del torneo de Wimbledon antes de su partido de semifinales contra el australiano Nick Kyrgios. El tenista balear venía con molestias en el abdominal, que se fueron agravando durante el transcurso del torneo, y finalmente en su partido de cuartos frente a Taylor Fritz, su cuerpo dijo basta.
Después de saber el alcance de su lesión el miércoles por la noche, Rafa Nadal tenía el jueves un día de descanso – sin partido- donde podía probarse en los entrenamientos para ver como reaccionaba la zona afectada, sobre todo a la hora de sacar, donde ya vimos que en su partido contra Fritz reducía considerablemente la velocidad y potencia de sus servicios y por tanto también, sus opciones reales de ganar el torneo a falta de los dos partidos más exigentes aún por delante.
El manacorí tenía programado su entrenamiento del jueves por la mañana a puerta abierta, para que los aficionados pudiesen disfrutar y ver entrenar al español de cara a su encuentro de semifinales contra el australiano Nick Kyrgios. Después de la noticia de la lesión, el español cambió y se ejercitó a puerta cerrada, dejando aún más dudas sobre su estado físico. Por la noche, Nadal daba una rueda de prensa donde anunciaba su retirada del torneo. De esta forma su rival, Nick Kyrgios, se clasifica para su primera final de Grand Slam donde espera el ganador de Novak Djokovic y el local Cameron Norrie.Nadal, que aterrizó este viernes en Barcelona para someterse a más pruebas para conocer el alcance de la lesión que sufre en el músculo abdominal, aseguró que le duele no poder jugar una semifinal de Wimbledon, pero que no lo queda más que «mirar adelante».
«Lo que duele es que no he podido competir en una situación privilegiada, porque estaba jugando bien y en unas semifinales de un torneo tan importante como Wimbledon. Al final no queda más que mirar adelante y estar en una actitud positiva», aseguró el tenista mallorquín en declaraciones a los medios de comunicación en el aeropuerto de la ciudad española.
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Una vez finalizada ya su aventura por el torneo londinense, donde buscaba ganar su Grand Slam número 23, Rafa ahora tiene su punto de mira puesto en la gira de cemento norteamericana, que goza de dos Másters 1000 – Montreal y Cincinnatti- termina con la celebración del US Open que arranca el 29 de agosto. Al no tratarse de una lesión demasiado grave, el español confía en poder llegar en buenas condiciones al mes de agosto y poder pelear en Nueva York nuevamente por lograr otro Grand Slam más en su palmarés y decidir más la lucha por el puesto de mejor tenista de la historia.
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